Desde que se estrenara en 2016, The nice guys ha pasado de ser un fracaso en taquilla a una peli de culto. El tándem Russell Crowe y Ryan Gosling estuvo glorioso bajo la batuta de un Shane Black que se soltó la melena del todo. Por ello, fans del film han estado esperando durante años que se anuncie una continuación. Porque lo cierto es que hay muchas razones por las que Dos buenos tipos debe tener una secuela. Aquí van algunas.
Gosling, Crowe y Black quieren
Shane Black estuvo trece años detrás de sacar adelante Dos buenos tipos. El guionista de Arma letal o El último héroe americano es un veterano de las buddy movies y en esta se nota que se lo pasó pipa. Desde el estreno del film ya dejó caer que por él para adelante. También han mostrado interés Crowe y Gosling.
El primero apuntó en abril de 2023 que él y Ryan habían pensado un título: The nice guys: The mexican detectives. Esto seguiría el gag que cierra la película. Además, en marzo del mismo año surgieron noticias que apuntaban a que el proyecto podría estar arrancando. Por tanto, los principales implicados quieren hacer posible la secuela a pesar de que sus agendas estén apretadas. Una razón de peso para que esta se dé.
Dos buenos tipos se ha vuelto una peli de culto
La abeja habladora, el intento de allanamiento de March, la fiesta de la industria porno… Dos buenos tipos posee muchos momentazos. Por ello ha logrado, gracias a su paso a plataformas, que el público la acabe apreciando. Así, con el apelativo «de culto» bajo el brazo, habría motivos para creer que una secuela pudiera tener éxito en taquilla. Porque el fallo comercial de The nice guys es el principal escollo para que
La primera peli deja todo a huevo para una segunda parte
Hay ocasiones en que puede haber grandes personajes, un contexto atractivo y demás, pero la propia historia contada hace que una secuela sea ridícula. Por suerte, no ocurre esto en Dos buenos tipos. El final, de hecho, abre totalmente las puertas a nuevas aventuras de March, Holly y Healy. Hasta el personaje de Gosling retoca el anuncio del detective al que interpreta e incluye a su amigo matón. Black, que ya ha participado en proyectos que derivan o son sagas, estuvo listo para no quitarse oportunidades.
El reparto todavía puede retomar sus roles y desperdiciar su química sería un crimen
Un peligro de ir dejando correr el tiempo es, precisamente, el tiempo. La gente envejece y puede llegar a resultar ridículo que retomen un papel. Hay excepciones, como la de Indiana Jones con El dial del destino, pero mejor no jugársela. Actualmente Crowe y Gosling siguen encajando perfectamente en los roles de Healy y March. Más al límite está Angourie Rice. Holly era casi una niña, aunque un salto a principios de los ochenta podría encajar con el hecho de que ahora tenga poco más de veinte.
Si no se quiere un salto temporal excesivo, ni perder a Holly, la secuela debe suceder dentro de poco. Porque uno de los grandes puntos del film es precisamente la afinidad de la terna protagonista. Ya se ha dicho que Crowe y Gosling han hablado del asunto, pero el contrapunto juvenil de Rice se torna indispensable para que se repita el mix de Dos buenos tipos.
Es la era de las franquicias, ¿por qué no una más?
Hoy en día se intenta hacer franquicias y sagas de casi todo. Marvel está a la cabeza como ejemplo de éxito. Crowe forma parte del mismo, en el pequeño papel de Zeus. Peor le ha ido en el Snyderverse o al Dark universe que abrió el reboot de La momia. Ya se ha señalado además que Shane Black ha participado en sagas de éxito como Iron Man y Arma letal. Warner Bros está a tope con las franquicias, véase Dune o Evil dead tras el éxito de Rise. Si opta por dar alas a Dos buenos tipos, tendría una opción relativamente económica para generar nuevas continuidades.